Llevan Alcorcón y Valladolid toda la temporada viviendo en un casi que les mantiene cerca de sus respectivos objetivos sin permitirles nunca creerse capaces de alcanzarlos. Sin embargo, esta situación les impide también desistir y darse por vencidos, por lo que parece claro que ambos pelearán hasta la última jornada, sin conseguir tregua ni descanso hasta que la competición toque a su fin.
Especialmente delicada es la situación que viven los madrileños, que consiguieron abandonar la zona de descenso tras la destitución de Cosmin Contra y la llegada de Julio Velázquez pero que desde entonces no han sido capaces de ir más allá. La Copa del Rey despistó a los alfareros, es cierto, sin embargo han pasado casi dos meses desde que disputasen los cuartos de final del torneo del KO y por tanto es exigible que un equipo acostumbrado a jugar los playoffs de ascenso dé algo más de sí en este tramo final de la temporada. Velázquez se excusó hace pocos días quejándose de que un proyecto mal diseñado desde el inicio estaba condenado a acabar la temporada sufriendo. Sin embargo, en la plantilla amarilla hay hombres de gran calidad como Kadir, Óscar Plano o Ivi capaces de sumar de tres en tres y romper así la racha de seis partidos sin ganar que lastra las opciones de los de Santo Domingo. La falta de gol es otro de los problemas crónicos que está sufriendo el equipo este año y de hecho nadie ha marcado menos goles que ellos en la división de plata del fútbol español.
Los de Pucela, por su parte, afrontan las últimas doce jornadas con la firme intención de dar caza a los seis primeros clasificados, alcanzando así los ansiados puestos de playoff. El objetivo, no obstante, está algo lejos, a cinco puntos de distancia, por lo que es obligatorio ganar este domingo y evitar tropiezos tan graves como el del último partido, en el que los vallisoletanos cayeron goleados frente al Levante por cero goles a cuatro ante la estupefacción de su propia afición.