Si alguien hubiese dicho al Celta a comienzos de la temporada que en la penúltima jornada estaría a siete puntos del Alavés, pocos lo hubiesen creído. Seguramente, más de uno habría pensado que debido al retorno a competición europea, el equipo se encontraba en descenso, como sucedió hace casi una década. Sin embargo, la realidad es que esta situación se ha producido gracias a la extraordinaria temporada que ha completado el cuadro vitoriano, aunque también es cierto que los vigueses se han descentrado debido a la Europa League.
En cualquier caso, el conjunto gallego llega a este encuentro con la firme intención de lograr una victoria que rompa la racha de cuatro derrotas consecutivas en la que actualmente se encuentra inmerso. Los de Eduardo Berizzo llevan semanas viviendo de las rentas, sin embargo la situación comienza a ser crítica ya que la imagen del equipo queda muy dañada. Los de Balaidos han encajado nueve goles en esos últimos cuatro encuentros, marcando uno solo y dejando claro que la competición liguera ha quedado en un segundo plano este año. Aun así, al conjunto celeste le resta un partido pendiente y en caso de ganar todos los que le quedan, maquillaría una campaña en la que se han vivido emociones de todo tipo.
Los de Álava, por su parte, luchan por acabar octavos, lo que significaría que los vascos han alcanzado la mejor cifra de puntos de su historia. Pellegrino ha sabido guiar a los suyos hacia el éxito este año y actualmente el club de Mendizorroza encadena cinco partidos sin perder, de los cuales tres acabaron en victoria. Ahora, el técnico argentino intentará que los suyos lleguen en el mejor estado de forma posible a la final de Copa del Rey, por lo que mantener la dinámica positiva es muy importante de cara a tan importante cita.