Se lo juega todo el Granada este fin de semana después del importante punto que consiguió el pasado miércoles en Riazor contra el Deportivo de la Coruña tras una brillante actuación de Ochoa. El conjunto andaluz necesita puntuar fuera para lograr la salvación y aunque la zona fuera de peligro se encuentra todavía a siete puntos de distancia, los granadinos no tiran la toalla sabedores de que en su estadio son un equipo fuerte, compacto y peligroso arriba. De los 20 puntos que el conjunto nazarí tienen en su haber, 16 los ha conseguido jugando como local, de modo que los de Lucas Alcaraz saldrán a por todas.
Es un misterio, no obstante, el once que el técnico del conjunto de la ciudad de la Alhambra pondrá en liza. El ex entrenador de Levante o Recreativo de Huelva entre otros cambia continuamente de esquema dependiendo de la fortaleza ofensiva del rival, y dado que el Valencia cuenta con jugadores rápidos y peligrosos en fase ofensiva es posible que la defensa de cinco vuelva a aparecer sobre el césped del estadio granadino. En punta, Adrián Ramos parece recuperado de sus dolencias y volverá a ser importante como referencia, bien acompañado por Boga y Carcela, con Pereira por detrás.
Los valencianos, por su parte, afrontan este tramo final de la temporada sin nada en juego y Voro lo está aprovechando para dar minutos a los jugadores con los que sabe que el club contará la próxima temporada. Al conjunto che solo le queda mantener la dignidad en estos últimos ocho encuentros ya que parece que la salvación es un hecho, mientras que los puestos europeos están a una distancia demasiado grande como para plantearse el asalto. En cualquier caso, el conjunto de la ciudad del Turia lo dará todo sobre el campo ya que pundonor, raza y rabia enlatada es lo que sobra en una plantilla que ha sufrido multitud de problemas esta temporada.